La empresa eléctrica nacional ve injusta la forma en que los clientes de los servicios de generación distribuida cobrarán la electricidad que inyecten a la red.
Hay ‘guerra’ en el sector de la energía eléctrica tras la reforma que abrió el mercado a la competencia.
Por un lado, las nuevas firmas solares que llegaron a México afirman que todavía existen barreras para competir contra el exmonopolio de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en el segmento de los pequeños consumidores de hogares y empresas. Por otro, la eléctrica nacional ha puesto trabas en los trámites necesarios para esta competencia y un amparo contra las medidas que por fin iban a permitir que las empresas de energía renovable pudieran quitarle clientes.
La CFE interpuso un amparo en contra de algunas de las disposiciones para la llamada generación distribuida, publicadas el 7 de marzo. Esas normas se refieren a los modelos de venta de electricidad y a cómo la CFE pagará a las compañías que utilicen su red, inyectando ahí la energía que generan, como las firmas solares.
Por ejemplo, estas reglas permiten que firmas como las solares puedan instalar paneles en los techos de pequeños usuarios —hogares, tiendas de autoservicio o pequeñas fábricas— para generar electricidad desde sus techos, y además mantenerse conectados a la red de CFE para usar su energía en las noches.
La electricidad que no consuman durante el día se enviará a la red de CFE y si al final de un periodo, como puede ser un año, ese usuario aportó al sistema, con sus paneles solares, más electricidad de la que recibió de CFE, puede optar a un pago por parte de la eléctrica nacional.
Por esta razón, las firmas que instalan paneles solares a pequeña escala mostraron su optimismo por la publicación de estas ansiadas reglas que abren un abanico de modelos de negocio para la venta de electricidad al usuario que tiene en su techo un panel solar. Y además, obligan a CFE a realizar la interconexión de este usuario con su red.
«Antes de la reforma energética, si consumías más de lo que generabas, CFE te cobraba la diferencia. Sin embargo, si consumías menos, CFE no te pagaba nada.
Las nuevas reglas ahora obligan a CFE a que pague a los usuarios», explica el director ejecutivo en la Asociación Nacional de Energía Solar (ANES), Víctor Ramírez.
Dos batallas
Un grupo de agremiados a la ANES, a la Asociación Nacional de la Industria Fotovoltaica, y al Consejo Mexicano de Energía, protestan por una serie de trabas que, afirman, ha puesto la CFE para realizar la interconexión, y así agilizar la migración de clientes de su red hacia el autoconsumo, según consta en una carta dirigida a la Comisión Reguladora de Energía (CRE), el regulador sectorial.
La CFE replica que ha realizado más de 8,000 interconexiones en lo que va de año, pero la ANES lo cuestiona. «Entre nuestros agremiados, donde tenemos una alta comunicación entre nosotros y otras asociaciones, no tenemos registrada una sola interconexión después del 10 de marzo», asegura Ramírez, de la ANES.
Por otro lado, la CFE interpuso una demanda de amparo en contra de dos incisos de las nuevas normas, pues considera injusta la metodología del pago que debería hacer a los usuarios que hayan generado más electricidad de la que recibieron.
«No se nos hace justo que la CRE no reconozca que hay otros costos implícitos en las tarifas cuando la electricidad llega a tu casa, que un generador distribuido no tendrá al generar en su propia casa», dijo un portavoz de CFE. «Pero no suspenden en absoluto las disposiciones actuales. No estamos bloqueando la interconexión», añadió.
Un juez ya admitió el amparo desde el 25 de abril, pero negó la suspensión provisional de la normativa.
El mercado para la instalación de paneles solares y otro tipo de energías renovables para la generación distribuida puede llegar a los 20,000 millones de dólares, con un potencial de hasta 450,000 usuarios de hogares de alto consumo, además de 3 millones de pequeñas y medianas empresas, según previsiones de la ANES.